Extraído del blog del Ararteko ( http://deb-web-dib-web.blogspot.com/ ) un post de Itziar B.
“La previsión de una nueva infracción en el anteproyecto de Ley de reforma de la Ley 4/2000 (de extranjería), que sancionaría a quienes ayudan a las personas extranjeras en situación irregular por entender que esta conducta "promueve la permanencia irregular" vulnera la declaración de derechos humanos y “ promueve” el miedo y la barbarie. Si se sanciona la compasión y la solidaridad puede dar lugar a que las personas “se planteen no ayudar” aunque sientan que es lo que tienen que hacer, que es lo que quieren hacer. Las leyes, si algo tienen, es poder sancionador. Por ello, la nueva infracción hará que algunas personas “dejen de ayudar a otras personas”. Si esa conducta se generaliza conseguiremos acabar con todos los gestos de bondad desinteresada que dignifican a las personas y a la sociedad. Estos gestos están haciendo que, muchas veces, las personas inmigrantes, al margen de las leyes que regulan la entrada, residencia y trabajo y de las políticas sociales, puedan tener una vida digna.
Las políticas de inmigración reflejan la posición de los Estados con relación a las personas más vulnerables. Detrás de estas políticas hay un modelo de sociedad y de economía. Si se sanciona la compasión y la solidaridad el modelo al que avanzamos no tiene nada que ver con la Declaración Universal de Derechos Humanos de 10 de diciembre de 1948. En fin, nos volcamos en celebraciones pero ni la leemos: artículo 1: Todos los seres humanos nacen libre e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.” Enviado por Pedro Moreno.
miércoles, 18 de marzo de 2009
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